La literatura es extensa sobre estudios historiográficos, sociológicos y de otras especialidades universitarias, referidos a la Reforma de Córdoba surgida en Argentina en 1918. Cada cierto tiempo se realizan eventos científicos para conmemorar dicha fecha. El significado de la Reforma de Córdoba para el gobierno de las universidades latinoamericanas es resaltado en dos publicaciones conmemorativas: Sader, Aboites y Gentili (2008) y Tünnermann (2008).
En junio de 1998, la Universidad de Los Andes organizó el Simposio:” La Reforma de Córdoba, 80 años después”. Propiciado por la Dirección de Relaciones Interinstitucionales de la Universidad, dicho simposio se realizó para celebrar los ochenta años del origen del fecundo Movimiento y permitió la discusión y reflexión sobre el tema con la participación de destacados autores nacionales e internacionales, entre ellos el Dr. Carlos Tünnermann Bernheim, uno de los teóricos más sobresalientes de la educación superior en Latinoamérica.
La Reforma de Córdoba de 1918 y su documento más representativo, el Manifiesto Liminar, publicado el 21 de junio de ese mismo año, se convirtió en el referente común, por afirmación o negación, de las instituciones latinoamericanas y, en general, de los discursos sobre el gobierno universitario en la región.
Independientemente de los proyectos políticos de nación imperantes en nuestra región en ese momento histórico, el gobierno universitario, la autonomía y legitimidad académica del mismo giraron alrededor del Estado-Nacional y del sentido explícito de la universidad.
Como lo resaltaría Gabriel del Mazo (1950) a mediados del siglo XX, la proclamación de la independencia de la universidad con respecto a los centros de poder político, económico o social, y la idea del autogobierno por parte de la comunidad universitaria, en la cual, además de los profesores, eran incluidos los estudiantes y los diplomados, constituirían el fundamento para la reivindicación del cogobierno y de una amplia autonomía universitaria: académica, administrativa, financiera e, incluso, patrimonial.
En la actualidad, como hace un siglo, la universidad latinoamericana está en un período de decisivos y contradictorios cambios, y es necesario analizar cómo la universidad latinoamericana logró, gracias a sus estudiantes de ese momento, dotarse de un proyecto propio que, además, se convirtió en un polo de conocimiento invaluable para el desarrollo de nuestras naciones durante el siglo pasado y todo lo que va del presente.
El Movimiento de Córdoba no expresó por sí solo la necesidad del cambio liberador que requería la universidad para acompañar el desarrollo latinoamericano del siglo veinte, sino que, precisamente porque surgió a raíz de amplios movimientos sociales reivindicativos en Latinoamérica, fue que la universidad comenzó a ser vista como un patrimonio social insustituible y por eso pudo hacer tan significativa contribución durante el pasado siglo.
Coincide esta celebración con uno de los momentos más difíciles y controversiales que ha vivido Venezuela desde sus orígenes, que afectan definitivamente el presente y de futuro de las universidades nacionales. La universidad autónoma vive un periodo de acorralamiento sin precedentes; las tendencias a la subordinación de la universidad son de naturaleza totalmente distinta a las del comienzo del siglo pasado, y con un poder de transformación de la universidad ante el cual la autonomía (no obstante su actual carácter constitucional) aparece ya como incapaz de garantizar un espacio mínimo de libertad e independencia al trabajo académico y a su misión respecto de la sociedad.
De allí que la discusión, análisis y recomendaciones que surjan de este simposio tendrán un énfasis en lo nacional, a la luz del legado de Córdoba y de la realidad venezolana actual.
La Seccional de Profesores Jubilados de la Asociación de Profesores de la Universidad de Los Andes (APULA) siente especial complacencia al patrocinar el simposio “Córdoba, 100 años después”, a celebrarse en la ciudad de Mérida los días 20 y 21 de junio del presente año e invita a los universitarios a participar en este evento.
David Díaz Miranda
Presidente de la Seccional de Profesores Jubilados de APULA.
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