miércoles, 12 de diciembre de 2018

Partidos inútiles que deben transformarse - Jesús Seguías



1.  Los partidos políticos venezolanos (viejos y nuevos) son los que han propiciado, por acción u omisión, el actual caos y tragedia de la nación.

2. He venido señalando que una de las razones del quiebre de Venezuela como país, es la ausencia de verdaderos partidos políticos, tragedia que comenzó a incubarse a partir de la década de los setenta del siglo pasado.


3. Lo que hoy existe es lo más parecido a plataformas electorales para hacer presidente a algunas personas determinadas. No son proyectos colectivos y con liderazgo colectivo. Son dominantemente proyectos mesiánicos, caudillistas y hasta un poco narcisistas.

4. Son generalmente estructuras burocráticas y sin líderes confiables, congeladas en la historia, plagadas de cuida-puestos o busca-puestos, sin alma ni pasión, sin formación política y anémicas de pueblo. De allí no sale nada útil en pleno siglo XXI.

5. No son auténticamente democráticos en lo interno, pero eso sí, exigen a los demás que sean democráticos y se rasgan las vestiduras exigiendo democracia y más democracia. Esta contradicción debilita su mensaje y ahuyenta a los potenciales seguidores. No los hace confiables. 

6. ta ausencia de partidos verdaderos es la que impide el despliegue de políticas de nación, es la razón por la cual es difícil crear y desarrollar estrategias exitosas. Es la causa fundamental de la tragedia de Venezuela. Es absoluto. Es definitivo.

7. Sin ánimo de buscar consuelo, es necesario recalcar que esta crisis no sólo es venezolana. Los partidos políticos a escala planetaria están sufriendo el impacto del cambio de eras históricas. Por eso están colapsando muchas naciones.

8. Hay dos opciones: O los partidos se transforman o serán desplazados. La dinámica de la sociedad se impondrá.

9. El cambio de las épocas históricas ha sido impulsado por una fascinante revolución tecnológica y científica que, a su vez, ha acelerado el cambio de los paradigmas en el funcionamiento de toda la sociedad humana. Estos son los grandes motores de este proceso de “destrucción creativa” (Sombart y Schumpeter) que sorprende al mundo.

10. Cada día, la sociedad opera más como red neuronal que como una estructura vertical e inclusive horizontal. La gobernanza es el nuevo paradigma político de la sociedad Post Capitalista. La sociedad más educada y civilizada reclama sus propios espacios. El mega estado y los políticos caudillos desaparecen a marcha forzada. Caos en el corral.

11. La revolución de la información ha empoderado a todos los ciudadanos. La manipulación de la sociedad cada día es un propósito harto difícil.

12. Las redes sociales tienen enloquecidos a quienes han reducido la política a simples ejercicios de marketing electoral y a una “comunicación” unidireccional basada en manipulaciones clásicas. ¿Hoy quién manda a quién? ¿Quién gobierna a quién? ¿Quién manipula a quién? Estos cambios son absolutos e irreversibles. Por tanto, todas las instancias orgánicas de la sociedad, sin excepción, están forzadas a generar cambios.

13. Las relaciones utilitarias entre los dirigentes y los militantes dinamitó las estructuras de los partidos. El compañerismo verdadero, la relación íntegra están ausentes. Hoy se manipula y engaña. Eso debilita.

14. El sector productivo mundial asumió el cambio como una realidad ineludible. Pero los políticos han sido la excepción. Es el estamento de la sociedad más rezagado a los cambios. La gran mayoría de los partidos políticos (por tanto, sus dirigentes) en el mundo sigue anclada en los paradigmas de la vieja era industrial, y no han dado una lectura correcta a este proceso indetenible de cambios arrolladores.

15. Y esto es lo que está generando una implosión de toda la estructura política mundial, con una población desesperada golpeando las puertas de los partidos y los gobiernos, exigiendo respuestas a las nuevas necesidades.

16. ¿Entonces Desaparecerán los partidos? Los partidos están asociados a la existencia de los estados-nación. Son sus ductores. Aún es prematuro presagiar la desaparición de los estados-nación, por tanto, es prematuro anunciar la desaparición de los partidos políticos.

17. Mientras tanto, los partidos políticos tienen que correr a generar cambios internos. Mientras más rápido y efectivo generen los cambios, habrá mayor gobernanza y prosperidad en las naciones. Lo contrario es el caos, y en algunos casos el infierno (tal como ocurre en Venezuela).

18. La actual crisis venezolana comenzará a superarse realmente cuando los partidos existentes impulsen aceleradamente procesos de cambios internos, y sin excusas autocomplacientes.

19. En los partidos políticos nunca puede haber alternativas a la democracia interna, al libre flujo de las ideas, a las discusiones francas y constructivas. Y hoy más que nunca. La democracia es a los partidos y a la sociedad lo que el oxígeno para los seres vivos.

20. A quién se le ocurriría cortar el oxígeno a un paciente que está en terapia intensiva bajo la excusa que está en estado crítico y que hay que posponer el suministro de oxígeno para cuando esté normalizado su estado de salud. Es sencillamente ridículo y criminal. Es acelerar su muerte y eso es exactamente lo que hoy hacen la mayoría de los partidos venezolanos. Siempre hay una excusa para posponer la democracia. Error capital.

21. De no haber cambios en los partidos, inevitablemente serán desplazados. Los pueblos no se cruzan de brazos. Inventan. Ese tren no espera por nadie. Muchos no van a morir. Aún sobreviven los antiquísimos partidos URD, el MEP y el Partido Comunista. Pero son absolutamente irrelevantes en la estructura del poder. Muchos de los actuales partidos terminarán “uerredizados”. No es justo.

22. La decisión de cambiar es gratis y genera resultados asombrosos, inclusive a favor de quienes hoy se oponen al cambio. Es su mejor camino a la victoria. Es el paso correcto. ¿Por qué tanta terquedad suicida? ¿Por qué esperar a ser desplazados? Están a tiempo... pero no mucho.



Micro Análisis


@jesusSeguias
GerenciaPolítica.com


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