La
situación universitaria para lo que queda de año y para el año 2016 luce muy
complicada, el año 2015 ha sido malo para los universitarios, ya que la cuota
presupuestaria que se asignó apenas alcanzó para 6 meses de gastos de
funcionamiento y 8 meses de sueldos y salarios, de hecho, ya en el mes de
septiembre tuvieron dificultad para pagar los mismos oportunamente, es de
destacar que también la investigación, postgrados y puesta en marcha de nuevas
carreras, hubo que detenerlas y reprogramarlas, motivado a la política
presupuestaria del Gobierno Nacional que, en lugar de enviar el presupuesto
todo consolidado, lo envía en partes a través de auxilios financieros y
créditos presupuestarios.
“Todo
esto dificultad la ejecución presupuestaria unido a la situación nacional con
una inflación galopante y la escasez que hay de bienes y servicios, hace que
muchas de las actividades universitarias se vean interrumpidas. Para muestra un
botón, de todo el presupuesto de la Secretaría de la ULA, en cuanto a la
partida para la compra de equipos, apenas se puede comprar un computador y una
impresora. A todo esto se unen los problemas que tenemos con el decreto 6649,
el cual interfiere con la ejecución presupuestaria y que nos obliga a pasar
recursos para el año siguiente y cuando vas a ejecutarlo, no puedes comprar
nada con ellos”, señaló José María Andérez, secretario de la ULA.
Hoy
la cuota presupuestaria para el año 2016, está por el orden de un 29 por ciento
de lo solicitado por la universidad, por lo que solo garantizarán 3 meses de
salarios y 3 meses de gastos de funcionamiento, adicional a esto, las variables
que la OPSU permite incluir en el presupuesto, van a afectar a la ULA y una de
las más importantes es la imposibilidad de presupuestar gastos de mantenimiento
de sus instalaciones.
Situación crítica en el comedor
universitario
La
situación actual del comedor es difícil, en términos de que no ha podido ser abierto
su servicio dado a la falta de insumos, esa situación no se ha sentido aún en
la ciudad, ya que los estudiantes provenientes de otros sitios del país no
están en Mérida debido a que, a partir de las decisiones de la Intergremial Universitaria,
los profesores están en conflicto, es decir, permanecen en sus sitios de
trabajo, pero no están dictando sus clases.
“Al
conversar con quienes manejan el comedor, encontramos problemas en cuanto al
presupuesto, el cual es insuficiente para la compra de insumos, además
actualmente, la OPSU está manejando un monto de 94 bolívares de costo por
bandeja, cuando la misma está sobre los 250 bolívares, más aún en un país en
donde la escasez de insumos se agiganta cada día y, cuando los consigues,
tienes que pagarlo mucho más caro que su valor regulado, razón por la cual los
comerciantes no tienen mucho deseo de contratar con la universidad el envío de
los productos, en especial carne, granos y productos regulados. Se tomaron una
serie de medidas a través de las licitaciones, pero las mismas solo permitiría
cubrir el 10 por ciento de los requerimientos del comedor, por lo que le
pedimos al gobierno que, a través del Ministerio de Educación Universitaria y
el Ministerio de Alimentación, nos suministren directamente, a través de las
corporaciones del Estado, que se encargan de la comercialización de los
productos alimenticios de difícil acceso en el mercado venezolano, los insumos
necesarios para el comedor universitario.
Preocupación por trabajos del Trolebús
El
Consejo Universitario recibió a la comisión universitaria de seguimiento y
asesoría a los trabajos del Trolebús, la cual ha venido trabajando durante
muchos años y ha sido muy crítica y participativa, al darle al gobierno
soluciones en materia vial. La ULA había tenido experiencias muy negativas con
el Trolebús, debido a que se afectaron terrenos universitarios en la parte sur
de la ciudad y al final no se cumplía con los compromisos, así como problemas
con el trazado de las vías y en la cual la universidad fue muy crítica.
“Hoy
estamos sufriendo lo mismo que hace años atrás, en la parte central de la
ciudad, puesto que se intervino las canchas del Luis Ghersy desde hace más de
año y medio y las labores de reconstrucción allí todavía no están terminadas, así
como en la Facultad de Medicina, las adyacencias del Edificio Administrativo,
el campo de fútbol del Estadio Lourdes es por ello que vemos con mucha
preocupación, que los convenios que se firmaron con Trolmerca, no se están
cumpliendo, ya que se estableció que las obras de reposición de afectación de
los terrenos universitarios tenían que ir por lo menos de la mano o más
adelantado que las obras viales y estamos viendo que la única actividad que se
ve en la calle es el tendido de los pavimentos de concreto, mientras que en las
cercas perimetrales de las canchas que están en el Gershy y las instalaciones
del Lourdes no está trabajando nadie. Las empresas han transformado a los
ambientes universitarios, sin el permiso correspondiente, en talleres, en vestuarios
para el personal, para que coman o hagan sus necesidades y vemos cómo en las
obras de reposición de la universidad, no hay ningún avance. Esto nos preocupa,
porque este incumplimiento nos hace pensar que se van a terminar las obras
viales y no vamos a ver que la universidad recupere, desde el punto de vista de
la seguridad de los espacios, las afectaciones que se le hicieran en su
momento”, dijo el profesor Andérez.
Para
finalizar, dijo el profesor Andérez que se le hizo un llamado al presidente de
Trolmerca para que se cumpla con los compromisos a los que se llegaron, ya que
la universidad no está satisfecha con la evolución de las obras y esto no puede
continuar así, ya que se está entorpeciendo las relaciones que la ULA tiene con
Trolmerca y en ese sentido les gustaría que las situaciones fueran diferentes.
Golfredo Lobo / Prensa ULA / CNP 14.293
Foto
CU
analizó presupuesto, comedor y trabajos de Trolebús en terrenos universitarios
(Foto Ramón Pico)
José
María Andérez, secretario de la ULA (Foto Ramón Pico)
No hay comentarios:
Publicar un comentario