En diás de abiertas postulaciones de candidaturas para optar a renovar autoridades universitarias, llama la atención leer el nombre de Mario Bonucci como candidato a reelección, asunto que ya se sabía en los pasillos universitarios, ya que ha estado en los ultimos meses con un discurso de recuperación de la Universidad, "La Universidad Está Viva.
Haciendo recorridos y reuniones internas, cuadrando acuerdos, evaluando actitudes, creando mas dependencias universitarias, buscando nombres de profesores en Facultades de relevancia para sacrificarlos buscando mostrarse como el mejor guía, el líder, el incorrupto, el de la más alta moral y ética. Sacrificios que le hacen sus ejecutores, el encargado de la Unidad de Auditoría que ya es profesor universitario, pero no auditor por concurso, y su oficina de abogados.
Después de más de 10 años en el poder, con la excusa de que el chavismo quiere apoderarse de la Universidad, descubrió que la ULA si puede enfrentarse a los retos económicos y politicos, después de arrasar con la institucionalidad universitaria, convirtiéndola en un potrero al mejor estilo de Juan Vicente Gómez, donde el Chito calle la boca, da miedo a los empleados, obreros, profesores y sindicalistas para enfrentarse al mayor destructor y corrupto académico e institucional que ha podido pasar por la Universidad.
Lo que menos le importa -a Bonucci- es el daño a la ULA, es un tema de poder, de dinero, de tener un séquito de docentes en el CU, quienes terminan después de las arengas en el circo romano, demostrándole obediencia y con ella han validado la enfermedad institucional.
Su necesidad de mantener los acuerdos politicos con el Chavismo y con el Madurismo, con la banca privada, con los miembros del TSJ, -buenos custodios de mantener su estatus institucional de gracia-, al igual que los vínculos y beneficios personales que ha obtenido con la Iglesia a la cabeza, con la banca panameña, ecuatoriana y venezolana, con las plusvalías a través del Parque Tecnológico y Corfoula, por la administración de los ingresos propios, para evadir usar las cuentas ULA, así como los dólares que obtiene por la producción de empresas agrícolas y de madera de la ULA.
Sin mencionar los dineros que administra a través de Secretaria, son bastantes dólares.
Bonucci tiene sobrados motivos para no ceder el poder.
Está en manos de los que no le deben nada a las autoridades a nivel personal, ya que institucionalmente, la deuda es -0, velar porque el corrupto e inmoral no renueve su poder, al igual que sus aliados.
21 de Julio del 2022
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