La oposición venezolana tiene un
plan, aunque parezca mentira. Se llama “Plan País, el día después” y
contiene la hoja de ruta para salir del apocalipsis económico instaurado por la
revolución bolivariana. Uno de sus ejes fundamentales es la puesta en
marcha de una especie de Plan Marshall a la venezolana, que guarda ciertos
paralelismos con el que tanto benefició a Europa tras la Segunda Guerra
Mundial. EL MUNDO ha confirmado que su contenido fue compartido con
embajadas “amigas”, europeas y americanas, y bien recibido por ellas, antes
de ser presentado ayer al país, publica El Mundo.
“Y no solo Plan Marshall, también se
puede hablar de un Plan Colombia (por la seguridad y por la paz) y un Plan
Siria (en relación a la diáspora masiva de los último años)”, añadió a este
periódico el economista Alejandro Grisanti, uno de los cerebros del “Plan
País”. Casi medio centenar de propuestas económicas capaces de
reconstruir Venezuela tras 20 años de chavismo y seis años de
recesión, durante los cuales ha perdido el 52% de su Producto Interior Bruto y
ha expulsado de su territorio a cuatro millones de sus ciudadanos.
“Se busca una recuperación rápida,
no en 20 años. Venezuela necesita una respuesta inmediata: poner
alimentos y comida en la mesa de los venezolanos. Por eso este plan contiene
financiamiento internacional extraordinario. Además, con el petróleo tenemos la
oportunidad de una recuperación rápida”, explicó el diputado Ángel Alvarado en
el foro celebrado ayer, que sirvió de presentación de la iniciativa. El
derrumbe venezolano, que solo encuentra parecidos con países en guerra y tras
graves catástrofes naturales, se profundiza día a día pese a que es el
país con mayores reservas petroleras del planeta, el segundo con más
yacimientos de gas y de oro del continente, y rico también en esmeraldas,
coltán y otros minerales.
El parlamentario José Guerra, antiguo
funcionario del Banco Central y “ministro” de Economía en la sombra, adelantó
que el “financiamiento internacional” es imprescindible para luchar
contra la hiperinflación, que según el FMI cerrará el año por encima de
1.000.000%. “La plata (dinero) también va a salir del petróleo, porque se va a
recuperar la producción, y del crecimiento de la economía, ya que más actividad
económica supone más impuestos”, anticipó Guerra.
Un teatro del este de Caracas atrajo
a quienes respaldan la propuesta, salida de los congresos celebrados por el
Frente Amplio Venezuela Libre por todo el país. Y al que, por supuesto, le
falta una llave trascendental, el cambio de gobierno, que nadie es capaz de
vislumbrar en los próximos tiempos.
“Soñamos con recuperar nuestra patria
para reconstruir el país. Ahora tenemos una visión compartida de cómo rescatar
Venezuela una vez rescatada la libertad”, resumió Gerando Blyde, ex alcalde de
la caraqueña Baruta y hombre clave en el Frente Amplio. El plan apuesta porque
la primera etapa, que contempla la emergencia humanitaria, sea paralelo
a una fase de estabilización que preceda a la reforma estructural de
un estado en el que casi nada funciona.
Dirigentes de Primero Justicia,
Voluntad Popular (VP) y Un Nuevo Tiempo (UNT), además de organizaciones civiles
y sindicales, se hicieron presentes en el acto, incluso el líder de VP, el
preso político Leopoldo López, participó de lleno en la redacción del capítulo
petrolero. Acción Democrática (AD) aportó también a algunos de sus cargos, pero
en menor cuantía. Independientes como Delsa Solórzano y Luis Florido
también escucharon atentamente las propuestas “que entran ahora en
discusión amplia”, advirtió Alvarado. El chavismo disidente también aportará
sus ideas a este plan del día después.
Entre varios de los dirigentes
opositores, en los corrillos iniciales, se repetía un mismo mensaje: “Siempre
nos critican porque no proponemos nada, pero ahora 2019 no nos va a agarrar
desprevenidos”. El Parlamento, que contará con una nueva junta directiva
en enero, presidida por VP, se ha comprometido a construir la agenda
legislativa necesaria para el rescate. De hecho, ya en segunda discusión se
encuentra la Ley de Recuperación de Activos, con la que se pretende recuperar
los miles y miles de millones robados por boliburgueses y dirigentes
revolucionarios que se encuentran hoy repartidos en bancos de EEUU, Andorra o
Suiza y en paraísos fiscales. “Vamos a crear una Oficina Nacional de
Recuperación de Activos“, adelantó el diputado Juan Andrés Mejía. “Y vamos
a eliminar el control de cambio (impuesto por Hugo Chávez hace 15 años)”,
añadió Alvarado entre el alborozo de los presentes.
“Se trata de la medida más perversa
del gobierno, un subsidio a los importadores con dólares baratos”, explicó
Grisanti. “Una inmensa oportunidad para robar en impunidad”, concluyó Mejía. Según
las investigaciones del Parlamento y según los cálculos de Jorge Giordani, ex
vicepresidente económico y gurú marxista de Chávez, el desfalco a través de
esta herramienta gubernamental se eleva por encima de los 400.000 millones de
dólares.
DANIEL LOZANO / Caracas
diciembre 20 2018, 8:54 am
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