Lo
sucedido en la “Toma de Caracas” el 1-S, donde más de un millón de personas de
diferentes partes del país, se concentró en un acto cívico, pacifico,
democrático, para presionar el anuncio por parte del CNE, de la fecha de activación
del Referéndum Revocatorio Presidencial;
y los acontecimientos que se desencadenaron
en la humilde población de pescadores Villa Rosa, donde un grupo de vecinos “cacerolearon”,
abuchearon, empujaron y corretearon al presidente Maduro, no viene más que a corroborar
lo que todos sabemos, y que se expresó con mucha contundencia en las elecciones
parlamentarias del 6D, se refleja en todos los estudios de opinión que se
realizan en el país, que los venezolanos quieren un cambio político, para que
se dé un cambio de modelo; que el chavismo perdió el apoyo popular, la mayoría
política y la calle. Sin pretender desconocer todos los esfuerzos de
convocatoria y organizativos de la MUD, sino que por el contrario, sumarnos a
los reconocimientos y elogios de diversos analistas políticos, si debemos
decir, que no hemos leído ningún análisis, observaciones o comentarios donde se
destaque el verdadero elemento movilizador de todas las acciones decididas de
nuestro pueblo, para tratar de poner fin al gobierno de Maduro y su pandilla de
civiles y militares forajidos: el “hambre”.
No por casualidad, aparece el
domingo un extraordinario trabajo del periodista Jorge Villet Salas, en FORO DOMINICAL,
donde a página completa, recoge en una entrevista las apreciaciones de la
médico pediatra y nutricionista del Iahula Nolis Camacho, titulado “En
Venezuela sí hay hambruna” (Frontera,04/09/2016), y otro aparecido en el diario
El Nacional, titulado: “Diagnostico: desnutrición” (04/09/2016), donde un
subtitulo: EL HAMBRE SEPARA FAMILIAS, y una frase de una madre desesperada: “No
sé si mis hijos entienden que no puedo darles comida”, grafican la terrible y
dramática realidad por la que está pasando nuestra gente. Lo recogido en estos
trabajos, es impresionante, que te llenan de indignación y coraje, nos permiten
acercarnos a una conclusión definitiva, ninguna madre o padre, se cruzará de
brazos para ver morir a sus hijos de hambre. Y estamos seguros, que no existe
en nuestro país, ninguna familia que se rinda ante la enfermedad o necesidad de
algún familiar o ser querido, sin luchar, a ver morir a su madre, su padre,
hermanos, abuelos, etc., por falta de medicinas.
El Gobierno, no quiere
entender, que nuestra gente ya no tiene nada más que perder, y que se lanzará a
las calles al menor llamado, que pueda ponerle punto final a la situación, que
pueda terminar con el gobierno militarista, corrupto y hambreador de Maduro. No
es la CIA, la Burguesía, el Imperio, la derecha apátrida, la MUD, Ramos Allup,
Chuo Torrealba, Capriles, Leopoldo López, María Corina, etc., los grandes líderes
movilizadores de las masas, es el hambre de nuestro pueblo!!!
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