El Gobierno
Nacional decretó un aumento salarial el pasado 1 de mayo, el cual, tal como lo
califican los gremios universitarios, es un aumento de miseria, ya que
constituye un porcentaje que no permite dignificar a los universitarios. Pero
como si esto fuera poco, anteriormente, el 1 de abril se había decretado un
aumento del 50 por ciento a los trabajadores universitarios que ahora, según el
instructivo para la data que hizo llegar la Oficina de Planificación del Sector Universitario (Opsu) a las universidades,
debería ser sumado al decretado por el Día del Trabajador, lo cual, además de
un atropello, golpea muchísimo más el mísero e insignificante ingreso que
perciben actualmente los universitarios y que ha hecho que gran cantidad de
ellos renuncien a sus instituciones y pasen a formar parte de la diáspora
nacional que ha tenido que emigrar a otros países en búsqueda de una vida más
digna.