El cristianismo, el budismo, el hinduismo, el zoroastrismo y la mitología griega suelen considerarse religiones completamente distintas, definidas en gran medida por sus diferencias.
Pero mirando atentamente, encontramos un símbolo que las conecta: el halo, esa aura alrededor de la cabeza de una figura sagrada expresa su gloria o divinidad y se puede ver en el arte de todo el mundo.
Hay muchas variantes, incluidos los halos rayados (como el de la estatua de la Libertad) y los halos llameantes (que aparecen en el arte islámico otomano, mogol y persa). Pero el más distintivo y omnipresente es el halo circular de disco.